De acuerdo con información proporcionada oficialmente por instituciones del gobierno de México, actualmente existen en México más de 5.5 millones de empresas y el 10% de estas empresas son familiares, esto es aproximadamente 550 empresas que operan bajo la tutela familiar sin procesos institucionalizados en su administración.
Las empresas familiares se reconocen cuando un grupo de personas (que son familiares) ejercen el control de la organización y que independientemente del tamaño de la empresa, del volumen de los ingresos, de la cantidad de activos o del número de empleados se rigen por un administrador para la toma de decisiones en la organización familiar.
El gran reto de las empresas familiares es lograr la continuidad del negocio que puede hacer por medio de la implementación del Gobierno Corporativo a través de la Institucionalización de la Empresa Familiar. Es un proceso estratégico que requiere de planeación y acciones contundentes.
La Institucionalización de las Empresas Familiares
- Desarrollar una Estructura Profesional de la Empresa.
La Institucionalización implica establecer funciones claras y perfectamente definidas no necesariamente con familiares y si así es, establecer roles, responsabilidades y alcances de cada miembro de la organización de familiares y no familiares, basado en habilidades, competencias y experiencias, no solo para mejorar la productividad, pero también para garantizar el crecimiento y permanencia de la empresa.
- Establecer un Gobierno Corporativo.
El gobierno corporativo evitará conflictos entre socios y familiares, fortalecerá la transparencia y la rendición de cuentas y con base en esto la toma de decisiones será más eficiente para generar un entorno de confianza, crecimiento e inversión.
Normalmente un gobierno corporativo requiere la creación de un Consejo de Administración, es conveniente que los consejeros sean externos, de experiencia relevante en el ramo de la empresa e independientes, con el fin de no comprometer criterios o conflictos de interés, lo cual ayudará a establecer políticas claras en relación a la intervención de la familia en la toma de decisiones y definir condiciones para la solución de conflictos de interés y familiares.
- Desarrollar un Plan de Sucesión.
En el momento de la institucionalización de la empresa familiar, pudiera sonar ocioso, pero es conveniente definirlo aún cuando sea a largo plazo, lo cual permite ir preparando sucesores potenciales. Los sucesores o sucesor potencial, puede ser un elemento externo o de la familia, quien debe tener claros sus objetivos, funciones y alcances y considerar la mentoría en el proceso de sucesión, lo cual garantiza la utilización de las experiencias ganadas, evitar tropiezos, por otro lado, garantiza la permanencia de los valores básicos de la empresa.
- Definir Políticas Financieras, de Inversión y Sostenibilidad.
La estabilidad financiera es primordial para la subsistencia de la empresa a largo plazo, por lo que es necesario definir criterios para la diversificación de inversiones, reinversión de ganancias, oportunidades de crecimiento, endeudamiento, asignación de beneficios, distribución de ganancias a socios y familiares, que permitan el crecimiento sostenible de la empresa.
- Cultivar la cultura Organizacional Continuamente.
La Cultura Organizacional representa los valores y la identidad de la empresa, esto juega un papel crucial en la cohesión y productividad de la empresa, representa la retención de talento, el gusto por estar en la empresa por parte de los empleados, vox populi “ponerse la camiseta”. Son elementos como el orden, la limpieza, la organización, la ética, la confianza, la innovación el sentido de pertenencia y todo esto representa productividad, y permanencia para la empresa.
En THE OD CONSULTING GROUP por medio de los procesos de institucionalización de los clientes que hemos apoyado, contamos con el acervo de experiencia suficiente para ser consejeros e implementar la institucionalización de tu empresa de manera exitosa y hemos sido cuidadosos en el concepto de preservar las garantías hacia los accionistas y familiares y establecer procesos formativos continuos hacia ellos. Consúltanos, somos THE OD CONSULTING GROUP